Como dijo el físico alemán apenas conocido, Albert Einstein: "No podemos solventar nuestros problemas con el mismo pensamiento que empleamos cuando los generamos". Y, en efecto, no podemos tratar de modificar una situación o resolver un problema si partimos de la misma base, de las mismas premisas que lo generaron en inicio. Para revertir una situación problemática es necesario cambiar radicalmente nuestra forma de entender y mirar la realidad, tomar distancia de ella.

Pero, ¿qué tiene que ver esto con la Última Milla?

¿Y qué tiene que ver el físico alemán con BlaBla Car, Wallapop, Spotify o Itunes? Como veremos con estos ejemplos, no fueron los participes del sistema quienes "reinventaron las normas del juego", sino formas de pensar disruptivas, formas de entender el problema desde otra perspectiva. Quizás sorprenda que una empresa de tecnología y ordenadores (como era Apple a inicios de siglo), reinventara la forma de consumir de la industria musical, dilapidando con iTunes y su iPod uno de los principales problemas del sector: la piratería (seguro que no somos los únicos que hemos comprado canciones a 0,99$). También sorprende como no fue ninguna empresa de movilidad y transporte quien viese el gran negocio que existía en el "Car Sharing", mercado que, por el contrario, descubrió un físico que en su momento trabajaba para la NASA. Hoy, BlaBlaCar está valorada en 2 mil millones de euros (2021).

Así como en otros mercados hemos visto cambios revolucionarios, el sector logístico no se ha quedado atrás, sobre todo en lo respectivo a los operadores logísticos y las actividades de última milla. No podemos olvidar que, según la CNMC, en 2014 se repartían al día 125.000 paquetes, mientras que para 2019, se había multiplicado por 10, llegando hasta los 1,25 millones, sin tener en cuenta el gran aumento que ha tenido la compra online derivado de la reciente crisis sanitaria (año de mayor crecimiento interanual hasta la fecha: crecimiento estimado de un 36% en 2020, según eMarketer). Nos referimos a un mercado, la logística de ecommerce (almacenamiento, transporte y distribución), que en volumen de negocio se ha duplicado en apenas 3 años: en 2015 su facturación global era de 915 M€, y para 2021 se preve que alcance una cifra cercana a los 3000 millones de euros (DBK Observatorio Sectorial: 2016-2020).

En este sentido, dentro del continente europeo encontramos grandes propuestas dispuestas a reinventar el mercado logístico en el interior de las ciudades. Paack, que recientemente ha cerrado una ronda de 44 M de euros, se centra en las entregas programadas para el mismo día y el día siguiente, generando una experiencia pensada por y para el usuario, con franjas horarias, seguimiento en tiempo real y fiabilidad en las entregas; actualmente, lidera el sector de entregas programadas en todo Europa. A pesar de su éxito y la gran cuota de mercado que ha alcanzado, fue creada en 2015. Ratificando la hipótesis de partida, sus fundadores provenían de mundos tan diversos como la programación, la abogacía o el marketing; y lanzaron Paack con la única intención de aliviar un dolor que ellos padecían constantemente en las compras online. Son las miradas alternativas lo que generan soluciones alternativas. Podemos encontrar también propuestas que centralizan todo su esfuerzo en una única tipología de paquetes. Es decir, lo que en Retail se llaman "Category Killers", pero en el sector de los operadores logísticos. GOI, empresa Española que el pasado 2020 recibió una inversión de 17 millones de euros, se centra en mercancías de gran volumen, pero sin embargo, no cuentan con flota propia, sino con socios y aliados en cada etapa de la cadena de suministro. Esto sumado a la potente tecnología de inteligencia artificial que desarrollan, logra la combinación perfecta para el seguimiento en tiempo real, la optimización de rutas o el monitoreo del punto clave: la entrega.

Quizás, la punta de lanza en modelos disruptivos de venta y distribución urbana la lleven empresas como Glovo o la compañía estadounidense DarkStore (con su aplicación móvil de Q-commerce "FASTAF", la empresa ha alcanzado una valoración superior a los 95 M $ con tan solo tres años de vida). La nueva propuesta radica todo su valor añadido en la disposición de hubs urbanos en el centro de las ciudades, empleados únicamente para almacenamiento. El producto es vendido a través de sus canales de distribución (principalmente app móvil) para ser entregado siempre en una franja inferior a dos horas. Estas neófitas propuestas, no solo re-inventan la operativa logística de las ciudades, sino la forma de consumir, de pensar el retail y de adaptarse a los cambios y necesidades de los hiper-conectados consumidores.

Desde la incorporación de la estrategia empresarial de Q-commerce de Glovo como "Case Study of Harvard Business School", hasta las elevadas sumas de capital levantadas por estas jóvenes empresas; se aprecia como un sector al completo está siendo repensado desde nuevos paradigmas. Soluciones que nada tienen que ver con lo visto hasta el momento; y según apuntan los análisis de mercado, no parece ser una moda pasajera. Aportando valor, tanto a las empresas como a los consumidores, transforman la realidad de un sector ya existente o incluso tangibilizan la creación de uno totalmente nuevo.

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